Se acercan las vacaciones y, aunque muchos podrán disfrutar de ellas en el mes de julio, otros tendrán que esperar hasta el mes de agosto para descansar. En esta época son muchas las familias que se marchan de viaje, siendo el coche la opción preferida por buena parte de ellas. Pero antes de cargar todo lo necesario, es importante que hagamos una revisión del vehículo a fondo para que todo salga bien Se trata de una puesta a punto que suele suponer un gran desembolso, pero que nos evitará averías y accidentes durante el trayecto. Lo cual, sin duda, puede terminar por arruinar nuestras vacaciones.
Hay que tener en cuenta que prácticamente el 50% del parque automovilístico español cuenta con una antigüedad de más de 10 años. Esto nos convierte en el segundo país más envejecido del continente, solamente por detrás de Grecia. La crisis económica de los últimos años, el aumento del precio de la gasolina, la falta de liquidez y las dificultades para acceder a un préstamo ha hecho que los coches que circulan por nuestras carreteras se hayan ido quedando anticuados y que no cuenten con un equipamiento moderno que pueda marcar la diferencia entre la vida y la muerte en caso de sufrir un accidente.
Por este motivo, es tan importante realizar un mantenimiento periódico de nuestro vehículo, siguiendo los consejos del fabricante, especialmente si vamos a hacer un largo viaje, como los que solemos hacer en vacaciones. En estos casos, lo principal es revisar el «triángulo de seguridad», que comprende la suspensión, los neumáticos y los frenos.
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Neumáticos
Los neumáticos son el único punto de contacto entre nuestro coche y la carretera y son clave a la hora de lograr un buen nivel de adherencia, respuesta de frenada, prestaciones y seguridad. Por eso, antes de salir de viaje, es fundamental revisar el estado de los mismos. Los neumáticos para coches deben reemplazarse cuando la profundidad del dibujo es inferior a 1,6 mm. Además es importante comprobar la presión en frío. Debemos hincharlos más de lo normal teniendo en cuenta que van a llevar más carga de lo habitual. Con respecto a la colocación de la carga, las maletas más pesadas deben ir en la parte inferior del maletero y si llevamos baca, debemos equilibrar el peso de cada eje.
Suspensión
Los amortiguadores son uno de los componentes más importantes de la suspensión del coche. Con el paso del tiempo, tanto estos como el aceite del interior y las piezas que regulan el flujo de este aceite se van deteriorando y si no realizamos un mantenimiento adecuado, el vehículo irá perdiendo estabilidad, lo que puede dar lugar a un accidente grave.
Por lo general, los amortiguadores se revisan a los 30.000 ó 50.000 kilómetros y suelen requerir un cambio cuando han llegado a los 60.000 kilómetros. Un amortiguador en mal estado, además de provocar accidentes por la inestabilidad del vehículo, puede dar lugar a un deterioro irregular de los neumáticos.
Hay determinadas señales en la revisión del vehículo que nos indican que los elementos de la suspensión necesitan un cambio. Para ello, podemos apoyar todo nuestro peso en la carrocería de delante y soltarlo de golpe. Si el coche solamente sube, es casi seguro que la suspensión está bien. Pero, si por el contrario, sube y vuelve a bajar, es muy posible que el ciclo de vida de los amortiguadores esté llegando a su fin. Si el coche oscila de arriba hacia abajo en marcha cada vez que nos encontramos con un bache o hace movimientos extraños al tomar una curva, es hora de llevarlo al taller.
Frenos
Para garantizar un buen funcionamiento del vehículo es fundamental comprobar los frenos, revisar el líquido de frenos e inspeccionar el depósito que lo contiene. El nivel debe encontrarse entre el mínimo y el máximo de las marcas consignadas en el contenedor. Además, es importante utilizar un producto recomendamos por un mecánico de confianza, lo que varía en función de la marca y del modelo del coche, el uso que le demos y las zonas por las que circulamos habitualmente. En cualquier caso, es recomendable sustituirlo al menos cada dos años. Si al realizar la comprobación de los frenos, notamos alguna carencia, no es aconsejable volver a rellenar el depósito, sino vaciarlo por completo en el taller y purgar el sistema para evitar mezclas y contaminaciones.